Hoy me han llamado de Canal Extremadura Tv, para concertar una entrevista de cara a la conmemoración del 25 aniversario de la aprobación del Estatuto de Autonomía y de la constitución de la Asamblea de Extremadura, y, además, me han pedido nombres de Diputados de la primera legislatura de la Asamblea, para igualmente entrevistarlos.
Al repasar los nombres me ha golpeado el recuerdo de dos extraordinarias compañeras con las que compartí aquellos años y que, lamentablemente, desaparecieron en la plenitud de sus vidas: Mari Angeles Bujanda y María Jesús López.
La primera fue Senadora en 1.982, Diputada en la segunda legislatura de la Asamblea y Consejera de Emigración y Acción Social de la Junta de Extremadura desde 1.983 hasta 1.988, en que falleció en un trágico accidente de circulación, a la altura de Puerto de Santa Cruz, cerca de Trujillo, cuando regresaba a su pueblo: Losar de la Vera. La segunda fue Diputada en la primera, segunda y tercera legislatura y Consejera de Emigración y Acción Social desde el fallecimiento de Mari Angeles Bujanda, hasta 1.993. Una penosa enfermedad la retiró de la política y acabó con su vida en 1.996.
Ambas, completamente diferentes, tenían algo en común, o, mejor dicho, varias cosas en común: su carácter, muy fuerte, su compromiso militante, su capacidad de trabajo y, su cariño hacia mi persona.
La Bujanda, como la llamaban cariñosamente en el PSOE, con quien compartí responsabilidades, proyectos y confidencias políticas, me tenia un gran cariño; cariño que era recíproco. Lloré desconsoladamente cuando recogimos su cuerpo en Santa Cruz del Puerto y cuando en la puerta del cementerio de Mérida lo entregamos a su familia que quiso enterrarla en su Navarra natal.
Con Maria Jesús la relación fue igualmente intensa, tanto en lo político como en lo personal; mantuvimos una estrecha amistad, compartiendo alegrías y sinsabores. En aquellos años era posiblemente la persona con la que mas cosas compartía.
Hoy, al recordarlas, he querido testimoniarles en este cuaderno público mi cariño y mi respeto.